miércoles, febrero 02, 2011

Los medios y el silencio insano!

Les traigo una nota que escribio un amigo, comunicologo, que viene a reflexionar sobre las noticias que no son, a causa de los intereses de los medios hegemónicos de comunicación.

¿Si no es noticia no hay acontecimiento? ¿quien le da el poder a los medios para manipular la construcción de la realidad? ¿que hay detrás del silencio? ¿tienen algún límite? en definitiva ¿quienes son los autoritarios? y tantas otras preguntas que nos atormentan diariamente cuando nos encontramos con noticias silenciadas por los intereses de grupos que monopolizan la información y por ende la contruccion diaria de la "realidad".

La importancia de disputar esa construcción de realidad, la importancia de la emergencia de nuevas voces que cuestionen esa "verdad", la importancia de las realidades y las verdades, la emergencia de lo diverso y los relatos que dan cuenta de la imposibilidad de una verdad, de una realidad.

Les dejo la nota que disparó este cuestionamiento, para que seamos concientes de lo que consumimos, para que contaminemos de duda a la sociedad, para que todos opten por escuchar varias verdades al día y elijan informarse y no reproducir el discurso de unos pocos.

los saludo, feliz de saber que somos más y más pensantes!!!



Medios esclavosFrente a las recientes denuncias sobre la existencia de trabajo esclavo en la Argentina, Roberto Samar y Ariel Lieutier ponen en evidencia de qué manera grandes medios de comunicación contribuyen al ocultamiento de estas situaciones reforzando la invisibilización social.

Por Roberto Samar * y Ariel Lieutier **

En la Argentina del siglo XXI hay trabajadores cuyas condiciones de vida y explotación lindan con la esclavitud. Sin embargo, los medios hegemónicos rara vez hacen referencia a ello. Frente a determinados temas que se contrapongan con los intereses o las concepciones de quienes dirigen su línea editorial, la salida es la omisión. Una noticia no es noticia, no por falta de interés sino precisamente por el interés de esos medios en que no lo sea. En el ágora mediático, a diferencia de un hospital, el silencio no es salud, sino ocultamiento.

La explotación existe por su invisibilización social. Pero la invisibilización es doble: también la reproducen los medios de comunicación, lo que refuerza y sostiene a la primera.

Un hecho puede taparse o puede hacerse tapa, reza un slogan de marketing comercial de un matutino. Eso ocurrió en el mes de enero, cuando Página/12 inició una amplia cobertura disparada por un procedimiento judicial, realizado en San Pedro donde se reveló que la transnacional Nidera, una de las mayores exportadoras de cereales, tenía reducidos a condiciones de servidumbre a 130 trabajadores, entre ellos 30 niños y adolescentes. El tema fue tapa no menos de seis veces en dos semanas. El país abolió la esclavitud en 1853, por lo que es razonable que para la política editorial de un diario el tema sea noticiable.

No lo fue, sin embargo, para Clarín y La Nación, para cuyos editores los ejes elegidos en esa semana fueron el golpe boquetero a un banco, la presión tributaria y la falta de billetes.

En dichos periódicos, la reducción a la servidumbre de trabajadores por parte de Nidera SA sólo obtuvo una cobertura marginal. Varios días después, cuando no se podía seguir negando la existencia de la noticia, el diario La Nación publicó en formato de nota periodística un comunicado de la empresa, sin dar lugar a otras voces. No hubo testimonios de las víctimas ni de las organizaciones que entienden en la problemática ni de las áreas del Estado que intervinieron.

Asimismo, en una editorial de La Nación, se tomaba el comunicado de Nidera como incuestionable y señalaba “cabe preguntarse si, tratándose de un trabajo migratorio, de pocas semanas, abonado en blanco y contratado de acuerdo con las leyes respectivas, se justifica la calificación de esclavitud y reducción a la servidumbre que se ha deslizado contra determinadas empresas agrícolas”. Cualquiera que haya visto las fotos y leído las crónicas y los testimonios de los trabajadores está en condiciones de responder a un interrogante tan malicioso. La editorial terminaba, en un increíble giro, deslizando sutilmente una sospecha de que en realidad Nidera podría llegar a ser víctima de una persecución política o ideológica.

Según los manuales de periodismo, la “actualidad” y la “novedad” son dos valores destacables que tiene que tener una noticia. Para Clarín el tema recién existió casi una semana después de su difusión. Su cobertura no superó los cuatro párrafos y también dio exclusivamente la versión de la empresa sobre los hechos.

Es probable que los vínculos con la transnacional Nidera influyeran en esa cobertura. Nidera es uno de los principales expositores en Expoagro, la exhibición anual organizada por una sociedad cuyos accionistas son esos diarios. Sin embargo, la reticencia de los medios hegemónicos a difundir noticias que puedan afectar sus relaciones comerciales va más allá de este caso puntual. Las noticias sobre las condiciones de trabajo esclavo en los talleres textiles clandestinos son otra muestra de esta lógica. Si bien este tema es abordado con cierta recurrencia por los medios más grandes, sólo excepcionalmente se hace referencia a las importantes marcas que han sido descubiertas contratando a estos talleres. Además, las coberturas tienden a dar más importancia a la falsificación de marcas que al trabajo esclavo.

Los medios de comunicación, ya se sabe, no reflejan la realidad, sino que muestran un botón de los acontecimientos y una primera interpretación. El abordaje sobre el trabajo esclavo, por lo general encubre la responsabilidad de los actores económicos, dotándolos de cierta impunidad pública que los deja indemnes de las sanciones sociales.

Rodolfo Walsh escribió que la historia en ocasiones se convierte en propiedad privada “cuyos dueños son los dueños de todas las otras cosas”. La agenda pública también lo es. Los medios son esclavos de sus intereses. Y eso también merece ser informado.

* Licenciado en Comunicación Social (UNLZ). Miembro del Departamento de Comunicación de SIDbaires.

** Economista (UBA). Coordinador del Departamento de Trabajo y Empleo de SIDbaires.


1 comentario:

  1. Hola Génesis
    Muy bueno el post. Al cabo, para un medio, y particularmente para los más poderosos, no sólo es "mercancía" lo que dicen, sino también lo que callan. Afectaría, por caso, a Clarín, informar con el rigor del caso lo que ocurre en Nidera, que es un socio comercial en Expoagro, y también afectaría a Clarín informar sobre el trabajo esclavo en los talleres textiles de la esposa del niño Mauricio, o mostrar la mediocridad e inoperancia que tiene como gobernante. Será ésta la construcción mediática de la realidad: si hasta le inventan una aureola de empresario exitoso cuando la plata la hizo su papá. Maravillosa la frase de Rodolfo Walsh con la que se cierra el post, dice justamente lo que los medios no dicen.
    Un Abrazo

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