martes, marzo 01, 2011

Ricardito, el ofendido

Entonces, cuando Cristina estaba a punto de concluir un magnífico discurso Ricardo Alfonsín se retiro “ofendido” por los dichos de la Presidenta. “La presidenta tuvo actitudes deshonestas”; “Al final hizo un reproche, ahí me levanté y me di cuenta que terminaba el discurso... no quería convalidar con mi presencia lo que me parecía una falta de respeto, cuando empezó a retar al Parlamento", se justificó en una entrevista radial; "Las leyes a las que se refirió son demoradas en su mayoría por el oficialismo, porque las traban en comisión", dijo Alfonsín, visiblemente ofuscado por esta actitud presidencial; “hizo un ejercicio abusivo de una cuestión de poder". Y remarcó: "No se pueden decir cosas al otro cuando el otro no tiene posibilidad de responder. Además de agraviar, institucionalmente es un uso abusivo del poder. Si hubiera podido contestarle hubiera dicho que todas las cosas que dijo que no se hicieron o no se pudieron hacer porque sus legisladores no trabajan".

¡Ay, Ricardito! ¡Qué pena que das! Siempre he sostenido que hacerse el ofendido es una forma de no hacerse cargo o de no afrontar situaciones difíciles. Es muy fácil hacernos los ofendidos cuando alguien dice algo que nos incomoda. Es una forma de no tener que responder. Me ofendo, me doy media vuelta y me voy. Y ya, me ofendo y nada, me las tomo.

Así, el ofendido Ricardito no se hace cargo de nada. ¿Cuál falta de respeto Ricardito? ¿Es faltar el respeto mencionar que el Congreso que él compone ha sido el más improductivo de la historia del último ciclo democrático? ¿Acaso no es una falta de respeto a la institución presidencial levantarse durante el discurso de la apertura de las legislativas? Entonces, ¿quién es el irrespetuoso Ricardito?

¿Ricardito acaso la oposición que se autodenominó Grupo A, no arguyó tener la mayoría parlamentaria como para quedarse con las comisiones del poder legislativo que deberían haberle correspondido a la primera minoría? Entonces, ¿a quién le corresponde dar quórum? ¿El oficialismo ha demorado la sanción de la ley que nos protege del trabajo esclavo en el campo? ¿Acaso o no fue el Grupo A con sus agro-diputados que, por cierto, de los derechos de los trabajadores del campo no quieren saber nada? Otra: ¿quién se retiró del recinto para que no sea aprobado el Presupuesto Nacional, acaso no corrió la U.C.R. detrás de las maniobras de Carrió y todo ese verso de las coimas para que esa ley no sea aprobada?

¿Es un ejercicio abusivo del poder dar el discurso de apertura de las legislativas cuando es lo que le corresponde por la investidura presidencial?

¡Hay Ricardito, das pena, mucha pena!

2 comentarios:

  1. A mi me parece que lo triste del caso es que es lo mejor de la oposición, y lo digo muy en serio. No sólo es el que nos puede dar pelea, es el que mas o menos habla en código político. El resto son una manga de impresentables que llegan a niveles superlativos. Solanas, que se la suele dar de instruido en la materia, tiró que Cristina no debería poder presentarse porque era la esposa del presidente en el período de Néstor... una boludez que sonrojaría al diputado mas pedorro del PRO.
    Saludos.

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