miércoles, agosto 11, 2010

Gorilas preocupados, preocupadísimos


Debo confesar que bien divertida leí la columna de ayer de Beatriz Sarlo del diario La Nación ("La conquista de las capas medias", 10/8/10). Allí, relata entre preocupada y azorada cómo el “maléfico” kirchnerismo va ganando a las clases medias.

Comienza entonces su relato ejemplificador de cómo los Kirchner van ganando a las capas medias. Cuenta entonces que recibió un llamado telefónico de alguien que “Hablaba bien, una sintaxis cuidada, de frases completas”, lector de Perfil y La Nación quien después de la aprobación del Matrimonio Igualitario ya no se siente tan opositor como antes. Primer sector clasemediero que se acercan a los Kirchner: los gays. ¡Lo curioso y vale remarcar es la sorpresa de Sarlo de que alguien que ya no se siente tan opositor y que muestra cierto agrado –mínimo- por los Kirchner puede hablar bien, con una sintaxis cuidada y frases completas! ¡Prejuicio burdo y barato Sarlo! Claro seguramente debe pensar que un kirchnerista convencido debe ser un bruto total que no sabe ni hablar.

Continúa y da nuevos ejemplos de cómo los Kirchner se van acercando a las clases medias, dice Sarlo: “a los viejos que se jubilaron sin aportes porque su vida laboral había transcurrido en negro, o a las familias que reciben el ingreso universal por hijo, cuya idea original no pertenece al kirchnerismo. Recordamos juntos que la ley de matrimonio gay no fue un proyecto de los Kirchner, sino de la diputada Vilma Ibarra, al que los Kirchner no habían prestado atención hasta que alguien, allá arriba donde se decide qué se trata y qué no se trata en el Congreso, consideró que había llegado el momento de juntar votos para el año que viene”. Claro, claro, para Sarlo, Néstor y Cristina son “oportunistas”, son “tremendos”, se aprovechan de las iniciativas de otros y se las arrogan como propias. Eso es bien peronista ¿no Sarlo?, ¿acaso no lo hizo ya el malo de Perón cuando “le robo” las ideas al bueno de Alfredo Palacios y las convirtió en ley? Así, desde entonces los sectores populares están engañados, en vez de ser peronistas deberían haber sido socialistas. ¡Qué barbaridad!, le falto escribir a la Sarlo. Pues bien, Sarlo se horroriza porque los Kirchner son re-contra peronistas, convierten en ley iniciativas de otros y con ello extienden derechos, logran que haya más ciudadanía, es decir, compatriotas que están mejor y contentos. Y sigue dando ejemplos y describe cómo vio con sus propios ojos a la gente contenta, consumiendo en las calles en oportunidad de los festejos del Bicentenario. Y sigue…

Evidentemente, para Sarlo toda esta gente feliz, con más derechos y mejoras concretas en su vida poco se va a preocupar por el Indec o el Consejo de la Magistratura, que son los temas “verdaderamente” importantes. Entonces, sentencia: “Con astucia y sin programa coherente, los Kirchner han girado ahora hacia las capas medias. No se puede subestimar el peso de las victorias culturales en esos sectores”.

La verdad es que Sarlo ya no merece el más mínimo respeto intelectual. Escribe desde el más lato prejuicio, con lo cual sus argumentos son pobres, paupérrimos. No sólo desprecia a quienes pueden apoyar al gobierno nacional, sino que además su odio a los Kirchner no le permite ver algo evidente: la extraordinaria expansión de derechos que estamos viviendo en este proceso político (derechos sociales, civiles, etc.). Me pregunto: ¿qué importa de quién es la iniciativa? Sin el apoyo del gobierno nacional ninguna medida como la Asignación Universal por Hijo, el Matrimonio Igualitario, la extensión de las jubilaciones, los subsidios, etc. podrían haberse concretado. Seguro que Sarlo dirá: “es puro oportunismo para ganar votos”. Yo le contesto, ¿qué político no quiere ganar votos? Pregunto además: la constante expansión de derechos en todas sus dimensiones, acaso ¿no exhibe un rumbo de gobierno?

Están preocupados. La derecha gorila está preocupada. Aborrecen ver a los sectores populares contentos. Se vuelven locos si a esta alegría se le va sumando la clase media. Se siente el temor que los invade: que alguno de los Kirchner gane las próximas elecciones presidenciales. Y si la derecha está preocupada esa es una señal de que vamos bien.

No hay comentarios:

Publicar un comentario