miércoles, febrero 24, 2010

Sobre la resistencia de la Iglesia católica al matrimonio gay

Hoy sale nuevamente en las noticias que, ante un nuevo fallo favorable de la justicia sobre los matromonios gays, Bergoglio sale a presionar a Macri para que presente una apelación. Lo primero que me viene a la mente es pensar que estos tipos se quedaron en la edad media, que son unos retrógrados, intolerantes, reaccionarios, etc. etc. Pero ese es, además de bastante verosímil un razonamiento sencillo. Porque al detenerme un minuto más creo que puedo entender algo de la razón del porqué de tanta alarma de parte de la Iglesia católica.

Mi razonamiento es el siguiente: el matrimonio gay como tal, erosiona las bases mismas del catolicismo. ¿A qué me refiero? Pues bien, la Iglesia católica siempre ha sostenido que las relaciones sexuales deben ser para procrear, ese es el fundamento del matrimonio y, ergo, de la familia según la entienden. Todo lo que se salga de allí es pecado mortal. Y la Iglesia católica, en ese sentido, es la que tiene la autoridad para perdonarte o para condenarte al mismísimo infierno. Recordemos además que para la Iglesia católica “la familia es la base de la sociedad”. Pues bien hete aquí el problema para los católicos: si aceptamos el matrimonio gay, lo primero que estamos aceptando es que la relaciones sexuales no son necesariamente para procrear, sino son para obtener placer y en algún caso por amor. Por lo tanto, la procreación deja de ser la fuente principal que justifica al matrimonio. En segundo lugar, estamos aceptando que las familias pueden tener formas variadas y no sólo la que propone la Iglesia católica. De esta manera, y como consecuencia de lo anterior, al modificarse el fundamento mismo de la sociedad (la familia, según la Iglesia católica) lo que tendriamos en puerta es toda una revolución en las relaciones sociales mismas. La Iglesia católica quedaría así desplazada del lugar predominante que busca ocupar a la hora de regular la vida de los sujetos. La Iglesia católica se queda sin una de sus bases de sustentación más fuerte: amonestar a los pecadores, controlar la mismísima intimidad de las familias, regular el placer de los sujetos.

¡Por eso es que Bergoglio está tan loco con el matrimonio gay! Es la biopolítica diría un amigo mío.

5 comentarios:

  1. en mi barrio dicen que cosas más groseras, como por ejemplo que Bergoglio le pide al gobierno de la ciudad que apele este fallo, le pide a Macri que se la apele, porque no tiene a nadie que se lapele

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  2. Eschuen esta pavada: "el matrimonio gay va en contra de los derechos humanos". Firman: los abogados catolicos!!!!

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  3. Excelente, es la biopolítica y en tanto tal lo que está detrás de la idea de pecado es la de "degeneración",de una influencia no solo antimoral sino sobre todo "contra-natura" que se podría extender en las pácticas de posibles hijos de tales matrimonios. creo que esto explica porque la práctica homosexual no es tan censurada como el reconocimiento de un nuevo modelo de familia. Creo que detrás de esta censura moral existe una profunda creencia en la degeneración de la especie. La iglesia no solo es moralista sino que en tiempos biopoliticos es fuertemente racista. es así que mientras puede no reaccionar ante la disolución de la familia como instititución en el marco de las sociedades individualistas neoliberales no puede soportar la emergencia de otros tipos de familias. por lo que lo que mueve a la iglesia, arriesgo la hipotesis, no es tanto la defensa de la familia ante los peligros que amenazan con disolverla sino el hecho de que frente a esos peligros existan intentos por darle nueva vida a un modo de vinculo (exigiendo el reconocimiento legal) que va mucho más allá de la simple función reproductiva. Lo que se juega es la lucha por la hegemonia de la "normalidad" y su control religioso e incluso médico. El miedo de la iglesia reside en la posiblidad de aceptación como normal de vinculos supuestamente anormales que pongan en riesgo a la especie misma "degenerandola".

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  4. Yo realmente no estoy de acuerdo con esto de matrimonios entre personas del mismo sexo, creo que es una locura...

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